Investigadores del Instituto de Geofísica (IGf) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) han logrado obtener imágenes sin precedentes del interior del volcán Popocatépetl, combinando técnicas de inteligencia artificial (IA) y la interferometría sísmica. Este avance permite una comprensión más profunda de la estructura interna del coloso, alcanzando profundidades de hasta 10 kilómetros.
El equipo, conformado por las doctorantes Leonarda Esquivel Mendiola y Karina Bernal Manzanilla, bajo la asesoría de los especialistas Marco Calò y Arturo Iglesias Mendoza, empleó la interferometría sísmica para analizar el ruido ambiental captado por una red de casi 40 estaciones sísmicas instaladas alrededor del volcán durante los últimos 30 años. Esta técnica, similar a una radiografía médica, permite visualizar los contrastes de materiales en el subsuelo.
Esquivel Mendiola destacó que, al comparar estudios previos, se identificaron inconsistencias en las imágenes disponibles del interior del Popocatépetl. Esto motivó la aplicación de la interferometría sísmica para obtener una representación más precisa de la estructura interna del volcán.
Por su parte, Bernal Manzanilla desarrolló un sistema de IA basado en aprendizaje automático para clasificar distintos tipos de sismos ocurridos dentro del volcán, como aquellos relacionados con el movimiento de gases, líquidos o la ruptura de rocas. Este enfoque permitió analizar una base de datos que abarca de enero de 2019 a marzo de 2023, proporcionando información detallada sobre la actividad sísmica interna.
Los resultados de estas investigaciones revelan que, contrario a la teoría de una única cámara magmática, el Popocatépetl presenta al menos dos zonas principales de acumulación de material magmático. Este hallazgo es fundamental para comprender mejor la dinámica interna del volcán y mejorar los modelos predictivos de su actividad.
Este avance científico no solo enriquece el conocimiento geofísico del Popocatépetl, sino que también proporciona herramientas valiosas para las autoridades de protección civil y los gobiernos, facilitando la toma de decisiones informadas para salvaguardar a la población ante posibles eventos volcánicos.
